Si tienes curiosidad o estás entrando en el tremendo cuestionamiento y te enfrentas ante la gran encrucijada que representa asígnale un valor real a tu propiedad, en las próximas líneas te vamos a explicar cómo puedes resolver este gran dilema de una manera objetiva y comprendiendo los principales criterios que habrá que tomar en cuenta para lograr determinar este cometido.

Definitivamente asignar un valor a una propiedad aparentemente no es cosa fácil, nos enfrentamos prácticamente a dos puntos de vista, el valor subjetivo vs. los criterios comerciales.

¿Qué pasa por nuestra mente?

En estas condiciones, si le preguntáramos a cualquier propietario sobre la cantidad de dinero que estimaría dispuesto a recibir en un momento dado que tuviera que vender su inmueble, la realidad es que nos enfrentaríamos a una cifra eventualmente mucho mayor a la realidad y probablemente un tanto fuera de mercado.

Esto es completamente natural, ya que como propietarios y al intentar precisar un valor real de nuestro inmueble, inconscientemente asociamos elementos como el esfuerzo que nos implicó comprar dicho inmueble. Al mismo tiempo consideramos las reparaciones o adecuaciones que se le hayan realizado después de adquirir la propiedad, inclusive también tomamos en cuenta los momentos agradables y más significativos que hemos pasado en compañía de la familia y queridos amigos.

La realidad es que todos estos puntos representan valores meramente subjetivos, condiciones que sólo toman valor en la mente del propietario y que desafortunadamente, para efectos de mercado y de operaciones inmobiliarias quedan sin mayor consideración y totalmente fuera de lugar.

Determinar el valor de tu propiedad siempre es un gran reto, confrontarnos con lo que cada uno de nosotros pensamos vs. la realidad comercial del inmueble frente a un Mercado Inmobiliario.

¿Qué papel desempeña un Asesor Inmobiliario?

Aun que la gran mayoría de las veces sea un proceso complejo separar los sentimientos y las operaciones comerciales, aquí es donde juega un papel muy importante Tu Asesor Inmobiliario para lograr este cometido, que además de tomar un papel de mediador, nos ayudará a comprender las verdades razones y criterios para alcanzar un punto de equilibrio funcional.

Habrá que entender que en esta etapa “La Misión“ será encontrar un valor para para tu propiedad apegado a la realidad comercial y al mismo tiempo se logre determina un “Precio justo”, un valor con el que se sienta cómodo el propietario como vendedor y que al mismo tiempo sirva como punto de partida viable para colocar la oferta en el mercado de bienes raíces frente a la competencia.

Como una de nuestras recomendaciones básicas, el paso número uno es contar con un “Avalúo Comercial” el cual siempre será necesario para determinar el precio de mercado de tu propiedad. Es importante mencionar que realizar un avalúo sobre tu propiedad implica el recuperar un análisis preciso y la consideración de una serie de factores que al final podrán determinar el valor del inmueble de manera objetiva y precisa. Como parte de los elementos que se toman en cuenta dentro de un avalúo, a continuación mencionamos cinco de los principales:

1. Condición del Inmueble:
Bajo este concepto se consideran los materiales de construcción, la calidad de los terminados y accesorios, pisos, maderas, cristales, zoclos y demás elementos con los que se haya desarrollado la construcción hasta su término, inclusive metros construidos y metros utilizables, construcción útil, áreas comunes y en general el estado del inmueble.

2. Características de la Ubicación:
En este concepto se analizan los factores sobre qué tan bien está ubicado el inmueble en relación a servicios y vías de acceso, por ejemplo: un inmueble situado dentro de un fraccionamiento y que éste se encuentre cercano al centro servicios, plazas o áreas comerciales, tendrá un valor mayor que un inmueble de las mismas características del primero que se encuentre a las orillas de dicho fraccionamiento.

3. Tipo de Orientación:
Existen factores que aun como propietarios muchas veces no tomamos en cuenta, esto es el caso de la orientación del inmueble, por ejemplo; una propiedad puede variar su valor si tiene una orientación Norte-Sur con respecto a otra de las mismas características en la que su orientación será Oriente-Poniente. También se consideran elementos tales como la distribución y disipación de la luz, es decir, un inmueble más iluminado tendrá mayor valor que un inmueble que se encuentre en un interior o que no reciba iluminación natural, pareciera que es inherente que un inmueble entre más luminoso tendrá más valor.

4. La Topografía de la Zona:
Del mismo modo, en este rubro se considera la orología de la zona, es decir, si el inmueble esta en una zona llana o se encuentra en un área naturalmente accidentada (subidas y bajadas, curvas y vados). Inclusive si es necesario atravesar determinadas zonas aledañas.

5. Servicios y Amenidades:
Este aspecto contempla lo relacionado al ecosistema en donde se encuentra el inmueble; se observan los servicios con los que se cuenta, por ejemplo: personal de vigilancia, seguridad, mantenimiento, limpieza, jardinería, albañilería y conserjes o mayordomos, así como las zonas comunes que pertenecen al predio, en su caso. Finalmente, se consideran como elementos de valor la influencia de la zona y los servicios que se encuentren en cercanías del inmueble, como: zonas comerciales, acceso a vialidades, escuelas, tiendas de autoservicio, hospitales, policía, bomberos, etc.

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Como un último punto y a manera de recomendación, merece la pena señalar que, para realizar un avalúo comercial sobre tu propiedad que sea confiable y que sirva como respaldo legítimo para determinar el valor comercial del inmueble, este deberá ser efectuado por “un perito” y que preferentemente el perito esté certificado por la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).

Finalmente, un avalúo comercial debidamente respaldado, siempre es un buen punto de referencia para determinar el valor comercial de tu propiedad, la segunda parte con lo que habrá que contrastar este valor es con la experiencia que te puede brindar tu asesor inmobiliario con respecto a la situación de mercado y las estrategias para colocar en oferta tu propiedad para que al final alcances un precio justo, un valor apropiado y de acuerdo con tus expectativas.

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